viernes, 31 de octubre de 2008

POEMA GANADOR-PREMIOS DEL TREN

PRIMER PREMIO

AQUELLAS CARTAS
Marco Antonio Campos

El ayer llega en el hoy que saluda ya el mañana.
El mirlo cantaba en el haya a la hora del degüello.
Era fines del ’72. Yo atravesaba en tren
Europa occidental, o caminaba, por saber adónde,
un sinnúmero de calles, y en cuerpos ondulados
de jóvenes tenues, o en la delgadez del aire en la rama
de los castaños, o en reflejos, que creaban imágenes,
en aguas del Tajo, del Arno o del Danubio, la creía ver,
y ella lejos, en mí, en Ciudad de México, con sus
clarísimos 19 años, regresaba en verde o azul, para luego irse
y regresar e irse en el ayer que hoy llega para hablar mañana.
Era fines del ‘72, y yo no sabía que el mirlo cantaría para mí
a la hora del degüello. Ella hablaba de amor en mí, por mí, de mí,
pidiéndome que le enviara más cartas, que guardaba
-eso decía- en el color de los geranios sobre los muros
de su casa en el barrio de San Ángel, sabiéndola diciembre
que era de otro, pero yo le escribía cartas y cartas
en el compartimiento del tren de una estación a otra,
bebiéndome milímetro a milímetro la morenía de su cuerpo
como antes, sin saber que la tinta se borraba como
el color de los geranios en el muro de su casa.
Pero al evocar ese ayer convertido en un hoy que es ya mañana,
sin escribir ya cartas entre una estación y otra, me parece
que aún oigo la canción del mirlo a la hora del degüello.

FALLADOS LOS PREMIOS DEL TREN 2008


FALLO DEL JURADO

La entrega de los Premios del Tren 2008, "Antonio Machado" de Poesía y Cuento tuvo lugar el jueves 30 de octubre en el Palacio Fernán Núñez, sede de la Fundación de los Ferrocarriles Españoles.

El Jurado de esta edición estaba formado por: Emilio Lledó (filósofo y escritor); Luis García Montero (Coordinador del Comité de Lectura de Cuento); Jesús García Sánchez (Coordinador del Comité de Lectura de Poesía); Álvaro Salvador (Ganador de los Premios del Tren 2007 de Poesía); Joaquín Tejeiro (Ganador de los Premios del Tren 2007 de Cuento); Manuel Núñez Encabo (Director de la Fundación Española "Antonio Machado"); Juan Miguel Sánchez García (Vocal del Patronato de la Fundación de los Ferrocarriles Españoles), y Juan Altares (Director de Actividades Culturales de la Fundación de los Ferrocarriles Españoles) como Secretario.

"Antonio Machado" de Poesía

1er Premio: "Aquellas cartas", de Marco Antonio Campos

2º Premio: "Último día de marzo", de Javier Vela

Accésit: "Compartimento C, coche 193", de Ángela Álvarez Sáez
"Cambio de agujas", de Juan Antonio Bernier
"Estación de término" Blas Muñoz Pizarro
"El tren de la costa" Juan José Vélez Otero

"Antonio Machado" de Cuento

1er Premio: "El viaje", de Benjamín Prado

2º Premio: "Una enorme tela de araña" Diego Paszkowski

Accésit: "El rey de bastos", de Miguel Barreras Alconchel
"Protocolo", de Pilar Clemente Arellano
"Diálisis de amor", de Juana Cortés Amunárriz
"La campiña inglesa" María Ángeles Torrejón

Los Premios del Tren, “Antonio Machado” de Poesía y Cuento siguen la larga trayectoria marcada por el Premio de Narraciones Breves "Antonio Machado", instituido por Renfe en 1975 y organizado desde 1985 por la Fundación de los Ferrocarriles Españoles. En 2002, después de 25 años del Premio de Narraciones Breves, se convocó la primera edición de los Premios del Tren, “Antonio Machado” de Poesía y Cuento. En 2008 se ha convocado la septima edición de estos Premios.

El número de participantes de esta edición ha sido de 1.440 autores procedentes de 32 países. Se han presentado un total de 1.690 cuentos y poesías, de los que 35 están escritos en catalán, 4 en gallego y 2 en euskera. Los Premios del Tren están abiertos a todos los escritores que presenten trabajos literarios de corta extensión y que incluyan de alguna forma al ferrocarril en su obra.

La dotación del Primer Premio en ambas modalidades asciende a 15.000 euros, un segundo premio de 5.000 euros y 500 euros a cada uno de los restantes seleccionados. La dotación total de los Premios del Tren 2008 asciende a 44.000 euros.

Las obras finalistas se publicarán en el mes de diciembre, dentro de la Colección Premios del Tren.

viernes, 10 de octubre de 2008

Finalistas Premios del Tren 2008



Obras finalistas -entre 1.690 presentadas- de los Premios del Tren 2008, que se fallan el día 30 de octubre


Según la nota que ha difundido la Fundación de Ferrocarriles Españoles, el fallo del Jurado y la entrega de los Premios del Tren 2008, "Antonio Machado" de Poesía y Cuento tendrá lugar el jueves 30 de octubre en la sede de la Fundación.

Las obras finalistas son:


POESÍA:

"Compartimento C, coche 193", de Ángela Álvarez Sáez

"Cambio de agujas", de Juan Antonio Bernier

"Aquellas cartas" de Real de Catorce (seudónimo)

"Estación de término" de Blas Muñoz Pizarro

"Último día de marzo", de Javier Vela

"El tren de la costa", de Juan José Vélez Otero

CUENTO:

"El rey de bastos", de Miguel Barreras Alconchel

"Protocolo", de Pilar Clemente Arellano

"Diálisis de amor", de Juana Cortés Amunárriz

"Una enorme tela de araña", de Diego Paszkowski

"El viaje", de Dylan (seudónimo)

"La campiña inglesa", de Mª Ángeles Torrejón Vázquez


El número de participantes en esta edición ha sido de 1.440 autores procedentes de 32 países. Se han presentado un total de 1.690 cuentos y poesías, de los que 35 están escritos en catalán, 4 en gallego y 2 en euskera.La dotación del Primer Premio en ambas modalidades asciende a 15.000 euros, un segundo premio de 5.000 euros y 500 euros a cada uno de los restantes seleccionados..Forman parte del Jurado de esta edición:
Luis García Montero (Coordinador del Comité de Lectura de Cuento);
Jesús García Sánchez (Coordinador del Comité de Lectura de Poesía);
Joaquín Tejeiro (Ganador de los Premios del Tren 2007 de Cuento);
Álvaro Salvador (Ganador de los Premios del Tren 2007 de Poesía);
Manuel Núñez Encabo (Director de la Fundación Española "Antonio Machado");
Emilio Lledó (filósofo y escritor);
Juan Miguel Sánchez García (Vocal del Patronato de la Fundación de los Ferrocarriles Españoles),
y Juan Altares Lucendo (Director de Actividades Culturales de la Fundación de los Ferrocarriles Españoles) como Secretario.
Nota: El cuadro es "Compartimento C, coche 193" de Edward Hopper, cuadro que da nombre al poema que presenté a los Premios del tren 2008, y sobre el cual versa.

jueves, 2 de octubre de 2008

Las Casualidades



Las casualidades es un poema que escribí hace ya más de dos años, está incluido en el libro "Las versiones del Tigre", editado por Vitruvio. Hoy me he acordado de ese poema no sé muy bien porqué, tal vez porque era su momento...


Las casualidades

De los cinco alfileres que le han metido en la boca, sólo uno de ellos tiene la punta redondeada y el cabezal con espinas. Lleva tres horas sin beber para no tragarse ninguno de ellos. En cuanto a la saliva, se va acumulando en los laterales de la lengua. Sabe que no va a aguantar mucho más tiempo. Al principio tan sólo observa, todo le parece más intenso con ese puñado de alfileres metidos dentro de la boca. Una viruta de madera en el borde de una reja. Las columnas encorvadas de un patio interior. La niebla que se desprende de los zapatos. Los peces gordos de un estanque romano. El agua que rompe un aljibe. Las trenzas de una niña que juega a ser visible. El empedrado asciende hasta las ruinas de una casona. Un Cristo iluminado por los faros de un coche. Solo es un estar atento. Ha caminado unos metros y la sed se le agria en la uña que lleva más larga. Tiene sed. Tiene demasiada sed. Como por arte de magia o de sincronismo se encuentra con una terraza en la acera. El hombre de la sed tiene el cabello y la barba blanca. Va vestido de explorador, aunque su aspecto es el de un filósofo, debe ser por los alfileres que tiene en la boca. El filósofo se sienta en una de las mesas y llama al camarero. Está a punto de beberse la cerveza cuando una mujer ocupa la mesa que queda libre. La mujer tiene los rasgos muy finos y lleva un tenedor entrelazado en la muñeca de la mano izquierda, donde debería ir el reloj. A primera vista la mujer es muy normal, pero bajo la mirada de un filósofo que tiene un puñado de alfileres en la boca, la normalidad se diluye detrás de la pupila. La mujer se sienta en una terraza, cruza las piernas y mira con sus ojos azules las postales que escribe un hombre con barba. Le parece curioso que el hombre sea tan metódico en el acto de escribir postales, todas las que va terminando las aparta en un montoncito a la derecha. Se enciende un cigarro y mira una viruta que se balancea en el borde del balcón que está sobre su cabeza. El hombre está escribiendo en una de las postales acerca de una teoría que se va a llamar de las causalidades. Mira los ojos azules de la mujer y siente la inocencia en el lóbulo de la oreja. El camarero se acerca y le dice que esa postal que está escribiendo va a ser muy importante para la humanidad. El hombre le pregunta que cómo lo sabe. No soy adivino, pero podría serlo. La mujer tiene los ojos azules y está loca, el camarero también sabe de su locura. El filósofo y la loca se miran. Ya no tiene alfileres en la boca. Se podría haber tragado cualquiera de ellos al beberse la cerveza, sin embargo, antes de que esto ocurriera, apareció la mujer y se llevó los alfileres en el color de sus dos ojos. El filósofo se ha quedado con la inocencia de la loca. Han desaparecido los personajes. Sólo queda la terraza, el balcón con la viruta de madera y una postal con la dirección borrada. La mujer va hacia donde estuvo sentado el filósofo y lee la única postal que ha dejado. He conocido a una mujer que está loca y que va a saber de su locura cuando lea estas líneas por casualidad. Sin embargo, ese conocimiento no es casual, sino causal. La mujer lleva días programando el encuentro. El filósofo, el adivino, la terraza, la viruta, los peces del estanque, la sed. El sincronismo me ha liberado de los alfileres. La locura te ha hecho inocente. Esta es la única casualidad. La postal está fechada en el año anterior. En el matasellos hay una marca hecha con cuatro alfileres y una idea.